Según la nueva ley, los transexuales también podrían ir a la cárcel entre uno y tres años. La ONU ha pedido ya la derogación de la nueva ley. Los promotores de la nueva ley afirman que contribuirá a mantener los valores religiosos en el país.
Redacción infocatolica.com
Quienes promuevan la homosexualidad o la prostitución, los médicos que practiquen operaciones de reasignación de sexo, los hombres que actúen «intencionadamente» como mujeres y quienes practiquen el «intercambio de esposas» también se enfrentarán a penas de prisión en virtud de la nueva legislación.
Un borrador anterior del proyecto de ley -una enmienda a una ley contra la prostitución que se aprobó a finales de la década de 1980- había propuesto la pena capital o cadena perpetua para las relaciones entre personas del mismo sexo.
El diputado Amir al-Maamouri declaró el sábado a Shafaq News que la nueva ley era «un paso significativo en la lucha contra la desviación sexual, dada la infiltración de casos singulares que contradicen los valores islámicos y sociales».
La aprobación de la ley se había pospuesto hasta después de la visita del primer ministro Mohamed Shia al-Sudani a Estados Unidos a principios de mes, según el diputado Raed al-Maliki, que presentó las enmiendas.
«No queríamos afectar a la visita», declaró al-Maliki a la agencia de noticias AFP, añadiendo que se trataba de «un asunto interno y no aceptamos ninguna injerencia en los asuntos iraquíes».
La ONU pide que se derogue la ley
Como era de esperar, la ONU, Estados Unidos y organizaciones de derechos humanos en Occidente han protestado contra la nueva ley pidiendo su derogación.
Ravina Shamdasani, la portavoz del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, expresó su preocupación el lunes diciendo que se siente «alarmada» por la aprobación de la nueva legislación en Irak. Recordó que los principios de igualdad y no discriminación son fundamentales en el Derecho Internacional y afirmó que todos tienen derecho al disfrute de los Derechos Humanos sin distinciones, incluyendo el derecho a la privacidad y a la protección contra la discriminación por orientación sexual e identidad de género. Además, destacó que estas leyes perpetúan la discriminación y exponen a las personas LGTBI a diversos abusos y discriminaciones
El Departamento de Estado de Estados Unidos dijo en un comunicado que la aprobación de las reformas legales era una amenaza a los derechos y libertades humanos.
