Al menos 15 fieles católicos perdieron la vida en un ataque a la iglesia de una aldea en la conflictiva región del norte de Burkina Faso.
Redacción por ForumLibertas – forumlibertas.com
Varios hombres armados atacaron a una comunidad que estaba reunida para celebrar la misa en una iglesia en Essakane. El ataque se llevó por delante la vida de 12 personas y otros tres sucumbieron posteriormente a sus heridas. El abad Jean-Pierre Sawadogo, vicario general de la Diócesis Católica de Dori, caracterizó la violencia como un «ataque terrorista» y confirmó que dos personas adicionales resultaron heridas.
En los últimos tres años, las iglesias han sido blanco y decenas de fieles han sido asesinados. «En esta dolorosa circunstancia, los invitamos a rezar por aquellos que murieron en la fe, por la recuperación de los heridos y por la consolidación de los corazones afligidos», dijo Sawadogo en un comunicado.
Ningún grupo ha reclamado la responsabilidad del asalto aún. Sawadogo instó a orar por los fallecidos y la recuperación de los heridos, y pidió la conversión de aquellos que perpetran violencia y disturbios en la nación.
Situación delicada
La región donde ocurrió el tiroteo no es la primera vez que se ve afectada por ataques de grupos armados, dirigidos a iglesias cristianas y clérigos. Burkina Faso está sumergida en un revuelo significativo con la mitad de su territorio fuera del control del gobierno debido a la violencia en curso, lo que ha dado lugar a miles de muertes y al desplazamiento de más de dos millones de personas. Además, la situación de seguridad de Burkina Faso se ve agravada por las fronteras compartidas con Malí y Níger, ambos lidiando con sus crisis de seguridad bajo el gobierno militar.
Burkina Faso, junto con sus vecinos del Sahel, Malí y Níger, se ha retirado recientemente del bloque político y económico regional, la Comunidad Económica de los Estados de África Occidental (CEDEAO).
La Unión Africana (UA) afirmó que «lamenta profundamente» la decisión anunciada por las juntas militares de Burkina Faso, Malí y Níger sobre su retirada de la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO) y ha abogado por preservar su «irreemplazable unidad».
Una de las razones citadas para el retiro de la CEDEAO fue la percepción de falta de apoyo de la organización en la lucha contra el terrorismo. La región del Sahel, incluido Burkina Faso, ha estado lidiando con una insurgencia yihadista persistente, y los gobiernos sintieron que la CEDEAO no los ayudó adecuadamente a abordar este desafío de seguridad.
El presidente de Burkina Faso, Ibrahim Traoré, incluso sugirió la posibilidad de desplegar tropas rusas para combatir a los yihadistas en el país si se considera necesario. Esta declaración subraya la seriedad de la situación de seguridad en Burkina Faso y la disposición de su liderazgo a explorar alternativas para obtener ayuda en la lucha contra la amenaza terrorista.