¿Cómo puede explicarse que Vela y Pérez hayan dominado el Ministerio Público sin ser vocales supremos?
¿Cómo es posible que hayan hablado contra sus superiores y exhiban signos exteriores de riquezas que pueden ser inclusive, cifras mayores en cuentas bancarias extranjeras, superiores a lo detectados en lima?
Los dineros recibidos por IDL y ONGs satélites a nivel nacional, con Gustavo Gorriti como gestor de su ente político de «fachada», le han otorgado tanto poder para que dominen instituciones del Estado, prensa y medios de comunicaciones asalariadas para defender todos sus objetivos.
¿Quién no sabe? El mayor defensor de Odebrecht y su casta corrupta es siempre Gustavo Gorriti.
La esperanza: sólo en un gobierno de coraje y honesto, capaz y soberano, lo metería preso.