El innovador trabajo está enfocado en las constancias de verificación ciudadana (que se lleva cada votante lo de emitir el sufragio) y el proceso de auditoría que se lleva a cabo en el 51% de las mesas electorales (una vez que se imprimen las actas tras el cierre de las mesas).
Redacción mldiario.com
Una académica estadounidense publicó una investigación que corrobora los resultados de las elecciones en Venezuela el pasado 28 de julio anunciados por la oposición que reflejan que el ganador fue Edmundo González Urrutia, rival del líder socialista Nicolás Maduro.
La autora de la investigación, fechada el 16 de agosto, es Dorothy Kronick, quien se desempeña como profesora adjunta de la Goldman School of Public Policy de la Universidad de California en Berkeley.
El texto, de 26 páginas, resalta que «esta auditoría añade un paso adicional para validar que los resultados del acta impresa coinciden con las papeletas que cada votante deposita en una urna una vez que ha seleccionado al candidato de su elección en la pantalla táctil».
28J Spanish by Lisbeth Piñeros
El actual sistema de votación electrónica de Venezuela fue estrenado en 2004 por el fallecido presidente Hugo Chávez Frías. En este marco, la académica estadounidense detalla que en los veinte años que han pasado desde entonces, el Comité Nacional Electoral (CNE) ha cumplido con presentar las actas electorales, salvo en tres ocasiones: la elección de la Asamblea Nacional Constituyente en 2017, un referéndum en 2023 y la elección presidencial del 28 de julio de este año.
En efecto, hasta el día de la fecha, y a pesar de la creciente presión de la comunidad internacional sobre el régimen de Maduro, el CNE no ha publicado ninguna data al nivel de las máquinas de votación.
Kronick indica que esta auditoría es crucial para certificar las votaciones en una determinada máquina de votación cuando hay declaraciones cruzadas entre distintos candidatos que se disputan los votos correspondientes emitidos. Si se publicaran los datos arrojados por las máquinas de votación en el sitio web del CNE, no solo los candidatos sino el público en general podrían chequear si los totales coinciden con los de la traza de papel.
Si, por ejemplo, el sitio web dice que el candidato del oficialismo recibió 500 votos y un político opositor 300 votos en una máquina dada -describe la investigadora- entonces la gente podría chequear que estos totales coinciden «con el acta impresa de esa máquina y el conteo manual de comprobantes (si esa máquina había sido seleccionada para conteo manual)».
Al analizar los datos de la reciente elección presidencial en el país sudamericano, el estudio concluye que «los dos registros impresos que genera el sistema electrónico de votación de Venezuela—un comprobante por cada votante y un acta por cada máquina de votación—esencialmente descartan el fraude o la falsificación por parte de la campaña opositora».
«La evidencia presentada aquí indica que ni siquiera con niveles extraordinarios de capacidad organizativa, talento conspirativo, y músculo financiero se podría haber perpetrado un fraude que hubiera producido los datos publicados por la campaña, sin dejar rastros en la traza de papel—rastros que, al cerrar este artículo, no han aparecido», señala.
«Por esa razón, incluso una persona con la inclinación a dudar de la oposición venezolana puede, sin ningún conflicto, creer que los datos de la campaña reflejan lo que votaron los venezolanos el 28 de julio de 2024«, finaliza Kronick en su informe.