El 28 de diciembre, día en que la Iglesia Católica conmemora la memoria de todos los santos inocentes, diversos grupos provida acudieron a rezar, en las afueras de ciertas Clínicas abortistas, por los inocentes que son asesinados a diario a causa del aborto y detener este crimen, pero los policías impidieron a un grupo de ellos rezar en el lugar.
Redacción por Religión en Libertad – religionenlibertad.com
Pasadas las primeras horas del 28 de diciembre, comienzan a tenerse noticias del desarrollo de los actos, protestas y vigilias por la vida previstos en todo España con motivo de la fiesta de los Santos Inocentes.
El abortorio Dator, en Madrid, suele ser uno de los principales focos de atención de esta jornada, tanto de militantes provida como de activistas feministas, así como de un número de policías que es cada vez más catalogado de desproporcionado.
Concretamente han sido dos decenas de policías de las Unidades de Intervención Policial -medios como El Confidencial digital elevan la cifra a 30 efectivos y cinco furgones- las que han acudido al abortorio a impedir que poco más de una decena de asistentes rezase el rosario.
Como suele suceder cada 28 de diciembre, el doctor Jesús Poveda ha vuelto a ser detenido por efectivos de la policía tras sentarse y mostrar «resistencia pasiva» ante las puertas del abortorio.
Tras la detención, un grupo de jóvenes acudió a la convocatoria de Rezar no es delito prevista para las 9:00, con la intención de rezar el rosario. Como explica Nicolás de Cárdenas, fueron desplazados de forma automática a unos metros del abortorio, donde pudieron llevar a cabo la oración portando una gran cruz y una imagen de la Virgen de Guadalupe.
Algunos de los jóvenes han explicado que los agentes sólo les han dicho que había otro acto convocado y comunicado a la Delegación del Gobierno y que por eso se tenían que mover del lugar. Los provida alegan que, conforme a la ley, no constituían una manifestación al ser menos de 20 personas.
Al mismo tiempo apareció frente a los provida un grupo reducido de feministas con la intención de manifestarse. Portaban carteles y pancartas con lemas como «fuera los rosarios de nuestro ovarios» o «lucha feminista = lucha trans».
Entre otros actos, destacan las pintadas en varios abortorios de Madrid y Barcelona recogidas por Jaume Vives en sus redes sociales, así como la colocación de cientos de bebes de plástico de meses de gestación de forma anónima en las calles de Toledo.
En Zaragoza, la plataforma AMAVI (Amigos de la Maternidad y de la Vida), reunió a decenas de personas ante el hospital clínico universitario Lozano Blesa, en el que se asesinan varios miles de niños quirúrgica y químicamente cada año.
Según informó uno de los manifestantes a Religión en Libertad, la concentración fue convocada «para rezar por la vida y denunciar este crimen silencioso realizado con la complicidad del Estado».
La concentración se desarrolló sin incidentes, contando con la presencia de familias, niños y recién nacidos así como con una presencia policial que destacó por su amabilidad. Los medios de comunicación autonómicos o de información religiosa no hicieron acto de presencia en este acto.
En Pamplona, el abortorio Ansoáin amaneció ante decenas de cruces instaladas a pocos metros «en memoria de los más de 7.000 navarros víctimas del genocidio del aborto», según informa la cuenta Universitarios Católicos.