Es un peligro Venezuela para la región por ser una superdictadura narcoterrorista que destruye naciones democráticas.
Redacción Peru21
«Mientras que el régimen chavista siga en el poder, la soberanía de cualquier país latinoamericano está en peligro y no bastará con la protección común de fronteras ni con comunicados. La solución es Panamá 1989».
Martín Belaunde Lossio, exasesor de Ollanta Humala, dijo durante el juicio que el gobierno de Hugo Chávez financió la campaña presidencial del nacionalista en 2006. Según indicó, el dinero era enviado a través de valijas diplomáticas.
Estas declaraciones coinciden con las del expresidente Kuczynski, quien en 2011 aseguró que cuando era premier en 2006, el servicio de inteligencia le informaba al Gobierno peruano sobre la llegada de valijas diplomáticas de Venezuela, en las que se sospechaba que había dinero para la campaña de Humala. (Correo, 2011).
En Chile, un exmilitar venezolano fue asesinado en febrero de 2024. Ronald Ojeda era opositor al régimen de Maduro. El fiscal del caso, Héctor Barros, asegura que el motivo del crimen habría sido político, y planeado y ordenado desde Venezuela. La familia de la víctima consideró que el régimen de Maduro estaría detrás del crimen. Incluso Noticias Caracol elaboró una investigación sobre cacería de opositores en Colombia y Chile llevada a cabo por la dictadura chavista.
Asimismo, diversos ciudadanos iraníes y sirios han sido detenidos en Argentina, Chile y Panamá con documentos falsos, todos ellos provenían de Venezuela. Estados Unidos inició una investigación en 2015 sobre el uso de pasaportes venezolanos por islamistas radicales.
Estos casos requieren ser comprobados, pero cuando el río suena es porque piedras trae. Los países sudamericanos deben replantear la crisis venezolana no solo como un problema migratorio, sino como un problema de seguridad nacional. Porque el Estado venezolano no es usado para proveer servicios públicos y garantizar un marco legal, ni siquiera como una dictadura convencional, sino como una organización criminal con brazos políticos, armados y económicos que ponen en riesgo la estabilidad de la región.
Mientras que el régimen chavista siga en el poder, la soberanía de cualquier país latinoamericano está en peligro y no bastará con la protección común de fronteras ni con comunicados.
LA SOLUCIÓN ES PANAMÁ 1989.
