Este es un claro ejemplo de que el ser humano no es solo materia, sino también tiene alma y espíritu.
La fe de sus padres, su confianza en Dios y la ayuda médica lograron milagros asombrosos en este pequeño.
Dios lo hizo, pues él actuó por medio de la medicina en este pequeño.
Y es un claro ejemplo de que toda vida humana es valiosa.