LA NOTA:
Javier Llaque Moya, expresidente del Instituto Nacional Penitenciario (INPE), no comparte la idea del premier, Eduardo Arana, de pretender enviar a delincuentes peligrosos nacionales y extranjeros a penales del exterior, entre ellos al Centro de Confinamiento del Terrorismo (CECOT) de El Salvador.
“Particularmente, cuestiono el tema por un motivo técnico. La pregunta es si este planteamiento tendrá marco constitucional. Es decir, ¿nuestra Constitución permitirá hacerlo?”, indicó.
Javier Llaque comenta que, según la Carta Magna, la sanción a un delincuente tiene como finalidad darle herramientas para rehabilitarlo, reeducarlo y reinsertarlo a la sociedad.
Otro de los inconvenientes que ve Javier Llaque para mandar a delincuentes peligrosos al exterior es el tema económico.
Además, el expresidente del Instituto Nacional Penitenciario (INPE) cree que la propuesta de Eduardo Arana es inviable.
Estados Unidos gasta 20 mil dólares al año por preso que manda a El Salvador, porque es el imperio y tiene dinero. El Perú tiene un presupuesto limitado. Para evitar más hacinamiento, recomienda construir nuevos penales, comprar grilletes electrónicos y preparar a los nuevos agentes.
